Esta enfermedad es muy difícil de diagnosticar porque puede confundirse con otras afecciones, por lo que sólo los médicos especialistas pueden detectarla.

La endometriosis se define como la presencia de tejido similar al endometrio fuera del útero. La endometriosis desencadena una reacción inflamatoria crónica que provoca dolor y adherencias. Las adherencias se desarrollan cuando el tejido cicatricial une estructuras u órganos separados. La actividad y las molestias debidas a la endometriosis pueden variar durante el ciclo menstrual de la mujer, ya que los niveles hormonales fluctúan. En consecuencia, los síntomas pueden empeorar en determinados momentos del ciclo, sobre todo justo antes y durante el periodo menstrual de la mujer.

Mientras que algunas mujeres con endometriosis experimentan fuertes dolores pélvicos, otras no presentan ningún síntoma o consideran que se trata simplemente de un "dolor menstrual normal". En raras ocasiones, el dolor cíclico también puede afectar a la parte superior del abdomen, por ejemplo, bajo las costillas o el pecho.

Se calcula que entre el 2 y el 10% de las mujeres de la población general padecen endometriosis y que entre el 30 y el 50% de las mujeres infértiles la padecen.

Las mujeres con endometriosis a menudo experimentan síntomas graves y una reducción significativa de la calidad de vida, incluyendo la restricción de las actividades normales, dolor/malestar y ansiedad/depresión.

Los síntomas de la endometriosis no son muy específicos, el diagnóstico de la endometriosis no puede hacerse sólo por los síntomas. Sin embargo, los síntomas pueden dar al médico una primera pista para el diagnóstico de la endometriosis.

Los síntomas de la endometriosis son:

• Períodos menstruales dolorosos (dismenorrea).
• Dolor pélvico no menstrual o dolor que se produce cuando la mujer no está menstruando.
• Dolor durante o después de las relaciones sexuales (dispareunia).
• Dolor al vaciar la vejiga/dolor al orinar (disuria).
• Dolor al vaciar el intestino (disquecia).
• Sangrado rectal doloroso o presencia de sangre en la orina (hematuria).
• Dolor en la punta del hombro.
• Problemas pulmonares cíclicos (neumotórax).
• Tos cíclica, dolor torácico o tos con sangre (hemoptisis).
• Inflamación y dolor cíclicos de la cicatriz.
• Fatiga.
• Infertilidad.
• Cualquier otro síntoma cíclico. Los síntomas cíclicos son síntomas que se desarrollan unos días antes de la menstruación de la mujer y desaparecen unos días después de que haya cesado la menstruación, o síntomas que sólo se producen durante la menstruación. Los síntomas reaparecen al mes siguiente, siguiendo el ciclo menstrual de la mujer. El dolor intenso puede medirse por la imposibilidad de realizar las actividades cotidianas normales (sin tomar analgésicos).

En realidad, existen varias manifestaciones diferentes de la enfermedad. Podemos dividir la Endometriosis en 3 presentaciones clínicas, que pueden aparecer solas o simultáneamente y es muy importante que sea atendida por médicos especialistas:

Endometriosis Superficial – son implantes de Endometriosis que no infiltran más de 5 mm por debajo de la superficie del peritoneo (capa que recubre el abdomen y cubre los distintos órganos).

Endometrioma ovárico – son lesiones que se infiltran en el ovario y forman quistes con contenido sanguinolento. Al tratarse de lesiones crónicas, la sangre contenida en el quiste es sangre vieja, que tiene un aspecto de "chocolate" cuando se vacía el endometrioma durante la intervención quirúrgica laparoscópica.

Endometriosis profunda – son lesiones que se infiltran más de 5 mm por debajo de la superficie del peritoneo. Estas lesiones pueden infiltrar órganos cercanos, principalmente la vejiga, la vagina, el uréter y el intestino. Es la presentación más agresiva de la enfermedad y el tratamiento quirúrgico es complejo y es mejor que lo lleven a cabo equipos multidisciplinares experimentados.

Aún se desconoce la causa exacta de la endometriosis, pero se sugieren varias teorías:

Menstruación retrógrada - el sangrado y el tejido menstrual se dirigen en sentido inverso, es decir, van del útero a la pelvis a través de las trompas de Falopio.

El tejido endometrial del útero puede transportarse a través de los vasos sanguíneos y linfáticos a cualquier lugar extrauterino, incluida la pelvis.

Los cambios en el sistema inmunitario permiten que el tejido endometrial fuera del útero crezca y se desarrolle.

La metaplasia celómica es el concepto de que las células del peritoneo y de la superficie ovárica pueden transformarse en tejido endometrial con determinados estímulos, como la irritación de la menstruación retrógrada o una infección.

Genética y epigenética.

Es importante recordar que no todas las mujeres que padecen uno (o varios) de los síntomas anteriores son necesariamente portadoras de Endometriosis. Se trata de síntomas que PUEDEN o no estar relacionados con la enfermedad. Sin embargo, todas las mujeres que presenten alguno de los síntomas mencionados en un nivel muy intenso deberían someterse a una evaluación ginecológica y a una investigación para detectar Endometriosis.

No todas las mujeres con Endometriosis experimentarán dificultades para quedarse embarazadas, pero se sabe que en general hay una disminución de la fertilidad en el grupo de mujeres con Endometriosis. Sin embargo, hay muchas otras causas de infertilidad que también deben investigarse y no todas las mujeres que intentan concebir y no lo consiguen son portadoras de Endometriosis.